autora, Sor Glynis.
La mujer cristiana hace de su vida un caminar siguiendo a Cristo en forma libre e inteligente, asumiendo que su crecimiento se basa en su propia dignidad perfeccionada por la gracia de Dios, teniendo como valor supremo el amor a Dios, a sí misma y a los demás..
El cristianismo valoró a la mujer desde sus principios, desempeñando un papel importante en la sociedad cristiana primitiva; basta leer las cartas de San Pablo y los Hechos de los Apóstoles. Más adelante y en tiempos convulsos, fueron místicas y grandes santas que influenciaron su época, como santa Hildegarda, sabia, médica, física, música..., gran predicadora, doctora de la Iglesia, Clara de Asís, Santa Eduvigis y Mectilde, las Catalinas: de Siena, de Génova, de Suecia..., Santa Teresa de Jesús, doctora de la Iglesia y reformadora del Carmelo, escritora de gran talla. Muchas laicas inspiradas por estas santas, que tenían infuencia en sus maridos,hijos/as, parientes y amistades.
En el Nuevo Mundo destacamos a mujeres religiosas como María de la Encarnación y Margarita Le Bourgois, fundadoras de Canadá. En nuestra Amerindia, Santa Rosa de Lima y Mariana de Jesús en Ecuador... y así llegamos a las Congregaciones religiosas femeninas en el mundo moderno, con su bandada de mujeres osadas y libres dispersas por los Continentes, quienes han entregado su vida al servicio de niñas, adolescentes, solteras y casadas, madres y ancianas, reconociendo en ellas su dignidad, dándoles amor y capacitación, para que desarrollaran su personalidad y se valoraran como personas en una sociedad que las empequeñecía, emponderándolas para enfrentar la vida en forma creativa y decidida.
Entre muchas otras Congregaciones femeninas, destacamos la Congregación "Nuestra Señora de la Caridad del Buen Pastor" creada en el S. XVII, específicamente para apoyar a la mujer explotada y abusada. En ella florecieron muchas hermanas que con su iniciativa y misericordia, en el anonimato, ayudaron a formar en los valores cristianos a la gente de entonces; algunas hermanas han sido reconocidas por su santidad en el pueblo, en la sociedad, en la Iglesia,.. como Santa María Eufrasia Pelletier la fundadora, las Beatas Teresa Soubiran francesa y María Dröste, alemana; la Sierva de Dios Josefa Fernández Concha chilena, nuestras hermanas filipinas que en un naufragio ayudaron a todos/as a subir a los botes hasta que no quedó lugar, quedándose ellas en la barcaza ofreciendo sus vidas hasta que éste se hundió; Agustina Rivas, peruana que como mártir fue asesinada por Sendero Luminoso junto a una familia del pueblo donde ella capacitaba a mujeres campesinas.
"Sean santas como yo soy santo dice el Señor"
Sor Glynis, autora
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